viernes, 13 de enero de 2012

Nos gusta pensar que somos fuertes.

En el fondo, a todos nos gusta pensar que somos fuertes. Que vamos a poder con todo lo que nos venga encima, que pudimos con lo de ayer y que podremos también con lo de mañana. Pero más en el fondo, sabemos que eso no es verdad. Porque ser fuerte no consiste en ponerse una armadura antirrobo ni en esconderse detrás de un disfraz; ser fuerte consiste en asimilarlo. En asimilar el dolor y en digerirlo, y eso no se consigue de un día para otro, se consigue con el tiempo. Pero como por naturaleza solemos ser impacientes y no nos gusta esperar, escogemos el camino corto. Escogemos el camino de disfrazarnos de algo que no somos y disimular. Sobretodo disimular.Si, a todos nos gusta disimular los golpes, sonreír delante del espejo y salir a la calle pisando fuerte, para que nadie note que en realidad, lo que nos pasa de verdad, es que estamos rotos por dentro. Tan rotos que ocupamos nuestro tiempo con cualquier estupidez con tal de no pensar en ello, porque el simple hecho de pensarlo hace que duela. Pero a veces, bueno… a veces tienes que darte a ti mismo permiso para no ser fuerte, bajar la guardia y darte una tregua. Está bien bajar la guardia de vez en cuando. No queremos hacerlo porque eso supone tener un día triste, uno de esos viernes que saben a domingo, un día de esos que duelen, de recordar y echar de menos. A los que ya no están, y a los que están, pero lejos. Sin embargo, hay momentos que es lo mejor que puedes hacer: darte una tregua. Poner tu lista de reproducción favorita, tumbarte en la cama, y si hace falta llorar. Llorar todo lo que haga falta. Eso no nos hace menos fuertes; eso es lo que nos hace humanos.

miércoles, 26 de octubre de 2011

No quieres recordar.

Hoy es uno de esos días. Un día que no quieres recordar pero que siempre terminas haciendolo por unas cosas u otras. Un dia de esos que estás rara y todo lo que te sucuede parece ser malo y dices: "Es que, lo hacen aposta...". Un día que quieres salir para despejarte y lo medio consigues, pero cuando parece que estás mejor tienes que volver a casa y piensas: "¿para ésto salgo?". Total, que hoy es un día de esos en los que no quieres que nadie te hable pero por esa razón, justamente hoy, todo el mundo lo hace, y tu terminas por poner tu mejor sonrisa :)


Se nos va.

La mitad de tu vida ha pasado, y es hoy cuando te das cuenta de que no la has vivido. Que de lo único que te has preocupado es de los errores del pasado y que los corregirás en el futuro, pero el presente no lo has vivido. Muchas cosas te han pasado y tú es como si estuvieras dormido, no te enteraste de las personas que entraron y salieron de tu vida. La gente que dejaste en el camino. Y todo eso por no vivir la vida a su tiempo.

domingo, 23 de octubre de 2011

I'm not complaining


No me quejo de lo que dejaste aqui
no me quejo de nada, porque al fin aprendí
lo que es amor, lo que es querer
al fin senti todo lo que no sabia podria existir

gracias a ti, debo decir que soy feliz
sin ti no sabria ser fiel
sin ti seguiria ajeno al amor

aunque debo mencionar que apesar de tu partida
tu sigues siendo mi unico verdadero amor.

Sleepless Night of Love


Mi pobre amor se está yendo...
yo me quedaré llorando...
La lluvia, leve, cayendo;
una nube, allá, glisando...

Mi pobre amor se está yendo.

Lejos, muy lejos!, soñando
la dulce amada, y tejiendo
su ilusión, me va matando...
Mi pobre amor se está yendo...

¿Qué pasa, que nada entiendo?
Qué pena se va a acercando?

La lluvia, leve, cayendo...
Una nube, allá, glisando...
La dulce amada tejiendo
su ilusión, que voy matando!

Mi pobre amor se está yendo...
Yo me quedaré llorando!

Fin de un amor.


No sé si es que cumplió ya su destino,
si alcanzó perfección o si acabado
este amor a su límite ha llegado
sin dar un paso más en su camino.

Aún le miro subir, de donde vino,
a la alta cumbre donde ha terminado
su penosa ascensión. Tal ha quedado
estático un amor tan peregrino.

No me resigno a dar la despedida
a tal altivo y firme sentimiento
que tanto impulso y luz diera a mi vida.

No es su culminación lo que lamento,
su culminar no causa la partida,
la causará, tal vez, su acabamiento.

sábado, 22 de octubre de 2011

:$

Si pudiese ser una parte de tí, elegiría ser tus lágrimas. Porque tus lagrimas son concebidas en tu corazón, nacen en tus ojos, viven en tus mejillas, y se mueren en tus labios.